Hay un tango muy conocido que dice “que veinte años no es nada”, pero en el caso del lupus, veinte años ha sido todo… sí todo un cambio, pues hace dos décadas entre 70 y 80 por ciento de las personas que recibían ese diagnóstico fallecían, en cambio, hoy el 90 por ciento logra tener una vida normal.

No es una enfermedad muy común, pero sí la padecen 20 de cada 100 mil personas en México, cabe destacar que es una enfermedad que ataca mayoritariamente femenina, pues de cada 10 personas que la padecen, nueve son mujeres y suele manifestarse entre los 20 y 40 años, es decir, mujeres jóvenes son quienes principalmente la tienen.

¿Qué es el lupus?

El lupus es una enfermedad autoinmune, es decir, ocurre un desequilibrio en el sistema de defensa del cuerpo y produce más células de defensa que las necesarias y éstas empiezan a atacar las células sanas.

Existen otras muchas enfermedades autoinmunes, en este caso las afectaciones incluyen las articulaciones, los riñones, el corazón, el cerebro, los vasos sanguíneos y la piel, y se da una inflamación generalizada en todo el organismo.

Cabe señalar que hay varias clases de lupus, el que causa las afectaciones descritas es el lupus eritematoso sistémico (LES), el otro que es muy común es el lupus eritematoso cutáneo cuyos efectos se limitan a la piel.

Cada persona que tiene lupus sistémico tiene su propia “versión” de la enfermedad, porque no se da de forma igual en todos los pacientes, aunque el dolor muscular suele darle al 90 por ciento. Además, los síntomas se presentan como brotes que pueden ceder tanto con el tiempo como ayudados por los medicamentos.

¿Cómo se manifiesta el lupus?

Las manifestaciones son:

-Erupciones en la piel de la nariz y las mejillas, en el llamado patrón de eritema de alas de mariposa.

-Lesiones, erupciones y moretones en cualquier parte de la piel, no necesariamente son dolorosos.

-Inflamación muy dolorosa de articulaciones que provoca rigidez, sobre todo en manos, pies, muñecas, codo y rodillas. Se acompaña de dolor muscular.

-Fotosensibilidad, es decir, la luz, especialmente la solar, resulta muy molesta

-Aftas y lesiones de herpes

-Pérdida del cabello

-Pérdida de peso

-Fatiga

-Fiebre

Muchas de esas manifestaciones, como el cansancio y la fiebre, son señales de los daños que se pueden dar en riñones, pulmones, cerebro y corazón. Estas ramificaciones de la enfermedad son las que potencialmente pueden ser mortales si no hay monitoreo y una medicación apropiada.

¿A qué se debe?

En este momento no se ha logrado determinar de manera clara cuál es la causa del lupus. Pero hay estudios que han ido demostrando un factor genético. A pesar de esto, no es identificada como una enfermedad hereditaria. También se ha visto que ciertos factores ambientales, exposición a algunos virus, algunos medicamentos y otras situaciones parecidas están involucradas en su aparición.

Seguramente, las investigaciones sobre sus causas avanzarán y darán mejores tratamientos, pero afortunadamente hoy sí se atiende a tiempo, se le da seguimiento, se cuenta con la medicación precisa y se hacen algunas adaptaciones menores (no exponerse a la luz solar sin protección, por ejemplo) se puede llevar una vida con balance interno y externo.